¿El fin de una era? La quiebra de Wolfspeed redefine el panorama de SiC

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La quiebra de Wolfspeed marca un punto de inflexión importante para la industria de semiconductores de SiC.

Wolfspeed, líder de larga trayectoria en tecnología de carburo de silicio (SiC), se declaró en bancarrota esta semana, lo que marca un cambio significativo en el panorama mundial de semiconductores de SiC.

La caída de la empresa pone de relieve desafíos más profundos en todo el sector: la desaceleración de la demanda de vehículos eléctricos (VE), la intensa competencia de precios de los proveedores chinos y los riesgos asociados a una expansión agresiva.


Quiebra y reestructuración

Como pionera en la tecnología SiC, Wolfspeed ha iniciado un acuerdo de apoyo a la reestructuración destinado a reducir aproximadamente el 70% de su deuda pendiente y a recortar los pagos anuales de intereses en efectivo en torno al 60%.

Anteriormente, la empresa se había enfrentado a una creciente presión debido a las elevadas inversiones en nuevas instalaciones y a la mayor competencia de los proveedores chinos de SiC. Wolfspeed afirmó que esta medida proactiva mejorará la posición de la empresa para el éxito a largo plazo y contribuirá a mantener su liderazgo en el sector del SiC.

“Al evaluar las opciones para fortalecer nuestro balance y reestructurar nuestro capital, elegimos este paso estratégico porque creemos que es el que mejor posiciona a Wolfspeed para el futuro”, dijo el director ejecutivo Robert Feurle en un comunicado.

Wolfspeed hizo hincapié en que continuará con sus operaciones normales durante el proceso de bancarrota, mantendrá las entregas a sus clientes y pagará a sus proveedores por bienes y servicios como parte de sus procedimientos comerciales habituales.


Sobreinversión y vientos en contra del mercado

Además de la creciente competencia china, es posible que Wolfspeed haya invertido demasiado en capacidad de SiC, apostando demasiado por el crecimiento sostenido del mercado de vehículos eléctricos.

Si bien la adopción de vehículos eléctricos continúa a nivel mundial, el ritmo se ha ralentizado en varias regiones importantes. Esta ralentización podría haber contribuido a la incapacidad de Wolfspeed para generar ingresos suficientes para cumplir con sus obligaciones de deuda e intereses.

A pesar de los contratiempos actuales, las perspectivas a largo plazo para la tecnología SiC siguen siendo positivas, impulsadas por la creciente demanda en vehículos eléctricos, infraestructuras de energías renovables y centros de datos con inteligencia artificial.


El ascenso de China y la guerra de precios

De acuerdo aNikkei AsiaLas empresas chinas se han expandido agresivamente en el sector del SiC, lo que ha provocado que los precios alcancen mínimos históricos. Las obleas de SiC de 6 pulgadas de Wolfspeed, que antes se vendían por 1500 dólares, ahora son ofrecidas por sus competidores chinos por tan solo 500 dólares, o incluso menos.

La firma de investigación de mercado TrendForce informa que Wolfspeed ostentaba la mayor cuota de mercado en 2024, con un 33,7%. Sin embargo, las empresas chinas TanKeBlue y SICC le están pisando los talones, con cuotas de mercado del 17,3% y el 17,1%, respectivamente.


Renesas sale del mercado de vehículos eléctricos de SiC

La quiebra de Wolfspeed también ha afectado a sus socios. El fabricante japonés de chips Renesas Electronics había firmado un acuerdo de suministro de obleas por valor de 2.100 millones de dólares con Wolfspeed para aumentar su producción de semiconductores de potencia de SiC.

Sin embargo, debido a la menor demanda de vehículos eléctricos y al aumento de la producción china, Renesas anunció sus planes para retirarse del mercado de dispositivos de potencia de silicio para vehículos eléctricos. La compañía prevé pérdidas de aproximadamente 1700 millones de dólares en el primer semestre de 2025 y ha reestructurado el acuerdo, convirtiendo su depósito en bonos convertibles, acciones ordinarias y warrants emitidos por Wolfspeed.


Infineon, Complicaciones de la Ley CHIPS

Infineon, otro importante cliente de Wolfspeed, también se enfrenta a la incertidumbre. Había firmado un acuerdo de reserva de capacidad plurianual con Wolfspeed para garantizar el suministro de SiC. No está claro si este acuerdo seguirá siendo válido en medio del proceso de quiebra, aunque Wolfspeed se ha comprometido a seguir cumpliendo con los pedidos de sus clientes.

Además, Wolfspeed no logró obtener financiación en el marco de la Ley CHIPS y Ciencia de EE. UU. en marzo. Según se informa, este fue el mayor rechazo de financiación individual hasta la fecha. Aún se desconoce si la solicitud de subvención sigue en trámite.


¿Quiénes se benefician?

Según TrendForce, es probable que los desarrolladores chinos continúen creciendo, especialmente dada la posición dominante de China en el mercado global de vehículos eléctricos. Sin embargo, proveedores no estadounidenses como STMicroelectronics, Infineon, ROHM y Bosch también podrían ganar terreno ofreciendo cadenas de suministro alternativas y asociándose con fabricantes de automóviles para contrarrestar las estrategias de localización chinas.

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Fecha de publicación: 4 de julio de 2025